En el año 1963 iniciamos las actividades en el rubro inmobiliario con el claro objetivo de prestar un servicio efectivo, cálido, oneroso y ameno, interpretando las demandas de los interesados, como finalidad excluyente. Lo lleva a cabo nuestro padre, Ramón Fernández, Martillero Público Nacional, quien siembra las raíces actuales dentro del mercado inmobiliario argentino.

Somos, desde ya, una empresa familiar con numerosas operaciones concretadas, a través de todos estos años, satisfaciendo a compradores y vendedores, propietarios e inquilinos. Acompañando a ambas partes desde el primer instante de una transacción,  hasta que su resultado  sea el esperado.

Por ello también sugerimos de qué forma y manera comienza su comercialización y eso es el antiguo cartel. Un inmueble con su cartel (trabaja las 24 hs.), en estimativos de estudio de mercado, ello genera el 70% más de consultas que una sin cartel. Además, el 20% de consultas llegan por “el boca a boca”, siendo el 10% restante a través de nuestras vidrieras y carteles enunciativos. Esto es de gran ayuda ya que las personas circulan a diario y surgen comentarios, que nos traen interesados. Sin dejar de lado por supuesto las redes sociales, la internet y las distintas empresas cibernéticas que llegan  a cada una de las personas a través de los distintos instrumentos que manejamos a diario.

Al escoger un nuevo hogar, preparamos  junto a los vendedores lo que se dice “la primera impresión es lo que vale”. Esto permitirá  al potencial comprador verse como próximo ocupante del inmueble visitado.

Para ello debemos preparar cada ambiente. Y también escuchar e interpretar las peticiones.

Hay variables para llegar al valor real de un inmueble. Se evalúan todos los detalles como ubicación, iluminación, estilo, medios de transporte, etc. 

Nuestra firma apunta a la efectividad en tiempo difíciles, donde la amena reunión de las partes con nuestra intermediación, llevan a la concreción del negocio esperado, en una charla conciliatoria donde nuestra experiencia aporta el porcentaje para que los sueños se concreten. 

El negocio inmobiliario, promovido por nuestra empresa va más allá del mero acto comercial, y es por ello, que a lo largo de los años hemos encontrado en nuestros clientes a verdaderos amigos que confían en nuestro asesoramiento inmobiliario por nosotros promovido y convertido en una garantía de idoneidad y acierto. Ya que nuestra empresa prioriza la ética, ante la concreción y realización de una operación que no sea beneficiosa y ganancial para todas las partes que intervengan. 

La finalidad de nuestra labor es concretar los sueños y compartirlos si nos lo permiten, para ello estamos a su servicio. Por ello tal vez nos elijan.